viernes, 18 de octubre de 2013

Al mal tiempo buena cara...Caiga quién caiga

¿ Se han preguntado alguna vez porqué tantos lazos de colores?¿porqué cuando erramos pequeños sólo celebrábamos el día del padre o el día de la madre y a medida que pasan los años celebramos un día para cada enfermedad?¿porqué hay lazos rosa, verdes ,negros rojos ,verdes, blancos y un sin fin de colores según mil tonalidades?¿ en verdad ,somos más solidarios ese día por acordarnos de algo o de alguien?¿creen que los afectados celebran ese día ,como los no afectados?¿porqué hemos asignado un día a la muerte? La muerte es como un ladrón de guante blanco que sabe el momento idóneo , viene con sorpresa y sin despedirnos, nos roba nuestra alma para traspasar puertas, que ni vemos. El efecto improvisado es inevitable, pero se han planteado alguna vez cómo les gustaría morir. Venimos con una lección y quizás nos vamos sin haberla aprendido, en realidad, de ello se trata ,entonces ,porqué:” dejas para mañana lo que puedes hacer hoy”;acaso crees que puedes irte sin acontecer tu propósito...y como los alumnos vagos repetimos vida tras vida las asignaturas pendientes. En verdad todos morimos cada día un poco, aunque nadie sabe muy bien lo qué es morir con dignidad. Así cómo cada vez hay más madres que eligen cómo quieren que nazca su hijo, en su plan de parto;hay menos gente que elige cómo morir. Claro está, ello depende del efecto cultural. Recuerdo en un simposium para el cáncer de mama, un médico muy conocido se dirigió a las mujeres para reafirmar ,que mejor no tener mamas para evitar la enfermedad (como si todo se trata de causa y efecto)Como si las monjas ,por el hecho de serlo, no tuvieran probabilidades de tener cáncer de útero o de vagina. Y es que todavía no nos hemos enterado que no van por allí los tiros.Que el órgano sólo indica la señal de alarma ,pero que la enfermedad se manifiesta cuando a base de resistencias no nos entregamos a la vida y al soltar. Realmente cuando sentimos que la vida no nos apoya, que todo se pone negro , que todo son esfuerzos y dificultades...es cuando aparece. En tiempos de crisis ,es cuando aparecen más problemas de ciática y lumbares... y ello no es paradójico. La dignidad de la persona es un valor inviolable,la muerte digna equivale a una muerte valiosa , vivida con suprema libertad a elegir y tomar sus propias decisiones de cómo quieres que acontezca. Todos ,a ser posible elegimos una muerte plácida , dulce , apacible como si de un eterno sueño o largo viaje se tratara. En memoria de un a amigo, escribo estas letras, él eligió pasar sus últimos meses de vida al lado de su única hija;sin despedirse de nadie más. Dos meses de plenitud por sentirse respectado en sus últimos días y satisfecho de la despedida ,se fue en silencio acogido por la paz y la tranquilidad de su cometido. Mi primera vivencia de la muerte fue a mis 10 años, no hubo despedida ,no hubo tiempo , el ladrón tenia mucha prisa...y todavía en noches de luna negra ,veo la sombra pasar, huelo a muerte y inválida me quedo en la cama con la piel de gallina. Estupefacta y sin aire, sin sosiego,sin poder respirar. Ella pasa de largo,a la búsqueda de su presa,hasta el día que venga a por mí. ¿Se han preguntado cómo quieren morir?¿han hecho su declaración de voluntades anticipadas?¿creen que el hecho de morir es el punto final al sufrimiento?¿acaso existe la muerte placentera?¿porqué no nos han educado a “bien morir”?¿prefieren dejar esta asignatura para una próxima vida?¿acaso no es de dignos el derecho a decidir?¿tienen los otros derecho a elegir por ti? No es lo mismo que la vela se apague ,por un soplo de viento ;a que la llama se difumina ,con la dignidad de acabar por el derecho a su fin.